Cómo cuidar tu centro de rosas rojas para que se conserve impecable
Tu centro de rosas rojas de tallo largo ha sido elaborado a mano con flores frescas y materiales de calidad para que puedas disfrutar de su belleza intensa durante el mayor tiempo posible. Con unos cuidados sencillos, podrás prolongar su frescura y mantener su elegancia intacta.
1. Colócalo en un lugar fresco y alejado del sol directo.
Las rosas rojas, al ser flores delicadas, prefieren ambientes frescos y con luz indirecta. Evita situarlas cerca de fuentes de calor (radiadores, hornos, ventanas soleadas) o en zonas donde reciban corrientes de aire constantes.
2. Hidrata la esponja floral cada 1-2 días.
La base del centro contiene esponja floral húmeda, que nutre directamente los tallos de las rosas. Comprueba con el dedo si la esponja sigue húmeda; si está seca, añade agua fresca con cuidado, vertiéndola poco a poco directamente sobre la esponja sin empapar la cerámica. Usa agua fría y, si es posible, baja en cal.
3. Evita moverlo constantemente.
Para mantener la estructura del centro y evitar dañar los tallos, lo mejor es colocarlo en un lugar donde no necesite ser movido a menudo.
4. Retira con cuidado las flores que se marchiten.
Aunque las rosas de tallo largo tienen buena duración, si alguna comienza a marchitarse antes que las demás, puedes retirarla con delicadeza para mantener la armonía del conjunto.
5. Disfrútalo con los cinco sentidos.
Las rosas no solo decoran: transmiten emociones. Tómate un momento cada día para contemplarlas, tocarlas suavemente o disfrutar de su fragancia.
Con estos cuidados, tu centro seguirá siendo un símbolo de belleza y presencia durante más tiempo. ¡Gracias por confiar en nuestro trabajo floral!
Valoraciones
No hay valoraciones aún.